Con la organización de Casa Maíz y el apoyo de Transición Colombia y Transition Network se llevó a cabo este tradicional festival. El domingo 1 de diciembre desde las 8 am y hasta las tres 3pm en el Polideportivo Vereda Resguardo Alto Sector Balcón de la Luna, a diez minutos caminando desde la plaza de mercado del municipio de Choachí reunimos a la comunidad para esta celebración a la vida que contó con micrófono abierto para compartir experiencias inspiradoras, música en vivo, danzas de paz universal y la presentación de Kuisi, Memoria Ancestral.
Con la organización de Casa Maíz y el apoyo de Transición Colombia y Transition Network se llevó a cabo este tradicional festival. El domingo 1 de diciembre desde las 8 am y hasta las tres 3pm en el Polideportivo Vereda Resguardo Alto Sector Balcón de la Luna, a diez minutos caminando desde la plaza de mercado del municipio de Choachí reunimos a la comunidad para esta celebración a la vida que contó con micrófono abierto para compartir experiencias inspiradoras, música en vivo, danzas de paz universal y la presentación de Kuisi, Memoria Ancestral.
En el evento que contó con 200 personas, muchas personas de Choachi y Bogotá, rurales y urbanas, tuvimos la Gratiferia, realizamos una charla sobre el movimiento de Pueblos en transición frente a cambio climático y practicamos el Trueque, una actividad que promueve una transformación en nuestros hábitos hacia una economía de dimensión más humana, más respetuosa del entorno, una economía solidaria impulsando acciones que nos recuerdan el ciclo natural del dar y el recibir.
En este espacio pudimos presenciar cientos de formas de intercambiar productos, servicios y saberes. Los más recurrentes: Semillas nativas, hortalizas, frutas y plantas medicinales, tortas, galletas, juguetes, artículos para el hogar y oficina, ropa, cocina, saberes tradicionales, habilidades profesionales, artesanías y hasta abrazos.
El propósito del evento nos llevó a generar un ahorro significativo en la economía familiar, con solidaridad e ingenio, fortalecimos las relaciones económicas, culturales y sociales, contribuimos a la construcción colectiva de conocimiento sobre Economía Solidaria, avanzamos en el desarrollo y fortalecimiento de “centros de trueque” permanentes y aportamos al desarrollo sostenible en términos de reducción de consumo y reutilización de recursos. Como conclusión debemos modificar los hábitos de consumo.
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