Para llevar a cabo la Transición de manera eficaz es necesario apoyarnos en grupos. Para conseguir los objetivos propuestos debemos convocar a un grupo de personas que asuman la Transición y estén decididos a aprender y a trabajar juntos. A estos laboratorios locales los llamamos Grupos Saludables. Las claves para el buen funcionamiento de estos grupos es desarrollar entre los colaboradores sus estructuras propias y ser claros desde el principio en lo que se refiere a los protocolos para el funcionamiento, el ingreso de nuevas personas, así como la articulación en torno a proyectos y actividades. El éxito de estos grupos depende de un ánimo contagioso, la forma en que se toman las decisiones y el aprovechamiento de los espacios para realizar reuniones exitosas. Entre sus miembros es indispensable determinar con claridad acciones y tareas y resolver de manera transparente las metodologías para interactuar y solventar los conflictos que puedan surgir al interior.